La céntrica Matallana reunió en la mañana de hoy 28 de diciembre a unas de 800 encajeras de bolillo que participaron en el XII Encuentro Nacional, una iniciativa organizada por la Asociación de Mujeres “María Górriz”, en colaboración con el Ayuntamiento de Puente Genil, que se ha consolidado en el tiempo y que es cita obligada de los amantes de este oficio artesanal.
En total, se contabilizaron 23 grupos de encajeras llegados desde distintos puntos de la geografía nacional, además de 30 puestos de ventas, lo que define la importancia de este acontecimiento que abre los que se vienen realizando en distintas localidades a lo largo del año.
En la clausura del encuentro, el alcalde de Puente Genil, Esteban Morales, dijo que se trata de "un día histórico" para el municipio porque casi 800 encajeras se han dado cita "al aire libre" para practicar esta afición con el bolillo, contribuyendo a promocionar una actividad artesanal que desde hace mucho tiempo se realiza en la intimidad de las viviendas. En este sentido, ha apostillado que con este encuentro se ha conseguido "un día de convivencia" que ha coincidido, además, con la celebración del Día de Andalucía.
El alcalde, ha querido felicitar a la presidenta de la Asociación de Mujeres “María Górriz”, Conchi García, por su empeño en recuperar “antiguas tradiciones lideradas por mujeres, ya que ha sabido consolidar un oficio en este gran evento y que ha sido quien ha liderado la propuesta de trasladar el evento a la propia calle y que ha permitido que podamos difundir esta tradición de trabajo artesanal que realizan las mujeres de muchos puntos de España y que hoy se han sentado a compartir con todos su afición".
Por su parte, Conchi García, recordó que la novedad de este encuentro ha sido este año "sacarlo a la calle, a pesar del riesgo que entrañaba debido a la multitud de encajeras que participan”. De hecho, ha manifestado que se trata de un evento "muy respetado y considerado" por los participantes. Según García, este arte no se limita sólo a las mujeres, sino que cada vez son más los hombres que se adentran en el mundo del encaje de bolillos para conocer su técnica. Además, se trata de un trabajo artesanal terapéutico que "armoniza y equilibra" el cuerpo y la mente.

